Al dirigirte a un resort o parque de diversiones en las próximas semanas, seguramente te encontrarás con alguna de las más de 50,000 personas trabajadoras de la industria de la hospitalidad que llegan a los EE.UU. cada año con visas J-1 Summer Work Travel (SWT) para trabajo y viajes de verano.
El programa de visitantes de intercambio J-1 se inició en 1961 para mejorar la diplomacia y fomentar el intercambio cultural. 104.512 personas trabajadoras con visa J-1 fueron contratados a través del programa SWTen el 2018. Pero a las y los defensores, trabajadores y legisladores nos han mantenido en la oscuridad, socavando los esfuerzos para proteger a personas con visa J-1. El programa J-1 SWT se ha transformado en una fuente de mano de obra barata y explotable.
Durante décadas, el funcionamiento interno del programa ha sido un misterio. Eso termina hoy. El Grupo de Trabajo Internacional de Reclutamiento Laboral (ILRWG, por sus siglas en inglés), una coalición de organizaciones de todos los sectores laborales, presidida por el CDM, publicó el informe “Iluminando la luz sobre el trabajo de verano: una primera mirada a los empleadores que usan la visa de viaje de verano J-1. ” El informe es una inmersión profunda en las fallas del programa y cómo resolverlas.
Estamos muy agradecidos con nuestros coautores del ILRWG: el AFL-CIO, Economic Policy Institute, Justice in Motion y Southern Poverty Law Center.
“Estoy hablando porque no quiero que otros caigan en esta trampa”, dijo Oliver Benzon, un ex trabajador de J-1 SWT en Ocean City. “El mundo necesita saber acerca de este programa, un programa aprobado por el gobierno que las empresas están utilizando para denigrar los derechos de las y los trabajadores”. Nos enorgullece haber lanzado este informe junto con Oliver y nuestros coautores durante una llamada de prensa esta mañana.
El programa expone a jóvenes de todo el mundo, como Oliver, a riesgos inaceptables, desde condiciones de trabajo intolerables hasta robo de salarios. 67 titulares de la visa J-1 se auto-reportaron como víctimas de trata de personas entre 2015 y 2017. Esta es probablemente la punta del iceberg.
El número de personas contratadas bajo el programa J-1 SWT ha aumentado más del 400% desde 1996. Los datos sugieren que algunas de las corporaciones más grandes de los Estados Unidos — Disney, McDonald’s y Holiday Inn — están usando el programa para evitar las restricciones en otras programas de visas de trabajo y salarios bajos.
El programa debe ser reformado. Nuestro informe recomienda políticas específicas para restaurar la integridad del programa SWT y proteger adecuadamente a las y los trabajadores en las industrias y comunidades afectadas
Pero ninguna de estas reformas será posible si el público permanece en la oscuridad sobre el programa J-1 SWT. ¡Revisa el informe y compártelo con todas y todos tus amigos y aliados!